Al fin llegó: Return to Monkey Island, el nuevo capítulo de la mítica saga de videojuegos, está disponible para jugarlo en PC y Nintendo Switch.
Ron Gilbert, creador y alma del videojuego, fue el encargado de anunciar que había un nuevo Monkey Island en marcha. Incluso desde su desvinculación en las últimas entregas, Gilbert ha sido el portavoz constante del juego, quien ha respondido a los fans, atendido entrevistas y comentado interesantes anécdotas desde su recomendable blog, Grumpy Gamer. Si la llama del juego sigue viva es, aparte de por su innegable calidad, por la pasión de Gilbert por su obra.
Sin embargo, el estreno del videojuego nos deja un sabor agridulce por la reacción de muchos fans sobre el diseño artístico escogido para continuar las aventuras de nuestros queridos Guybrush Threepwood y Elaine Marley. Ante las primeras imágenes hubo un considerable número de ataques, burlas y reacciones desagradables en general, tanto desde las redes sociales como en los comentarios del blog de Gilbert.
Hasta tal punto llegó el acoso que Gilbert decidió cerrar los comentarios de las siguientes entradas y no volver a hablar del trabajo. Lo cual nos hace pensar dos cosas.
La primera, que Gilbert, que ya tiene una edad, no debe estar acostumbrado a la existencia de los trolls, que pondrán a caldo cualquier cosa para sentirse vivos y olvidar su propia amargura.
La segunda, que Gilbert probablemente es una persona estupenda, un hombre dedicado y respetuoso con sus seguidores. Tan respetuoso que ha decidido embarcarse en esta secuela, que le ha llevado dos años de esfuerzo. Gilbert responde a muchos de los comentaristas en su blog, algo que muchas estrellas en otros campos, comparables a Gilbert en importancia, no hacen, o delegan en community managers. Responder en un blog lleva tiempo y nadie te paga por ello.
Pero Gilbert parece ser un tipo majo. Probablemente él ha sido fan de otras cosas, y trata a la gente como le gustaría que le tratasen a él sus propios ídolos.
Aún a riesgo de perder cercanía con uno de los mejores diseñadores de videojuegos en la historia del medio, Gilbert debería recordar la antigua máxima de Internet, que sigue siendo más válida y necesaria que nunca: no alimentes al troll.
Por nuestra parte, jugaremos a Return to Monkey Island con mucho gusto. Y que los trolls sigan ladrando.