Desde su nacimiento, la televisión no ha encontrado ningún rival a su altura. Desbancando a la radio, son muchas las personas que aseguraron que con la llegada de Internet su hegemonía terminaría finalmente. Pero parece que todas esas personas se equivocaban porque Internet y televisión han resultado ser un tándem.
De acuerdo con los datos facilitados por la empresa Nielsen, los norteamericanos en 2012 vieron más televisión que nunca, un total de 34 horas semanales de media, la diferencia radica ahora en que en vez de verla junto a su antes inseparable amigo el portátil, ahora lo hacen con sus smartphones y tablets en la mano.
NPD Group por su parte realizó un segundo estudio relacionado con esta misma temática. En él vemos cómo un 87% de los habitantes de Estados Unidos utiliza al menos una segunda pantalla mientras ve la televisión.
El cambio de estrategia de los anunciantes
Ante este visible cambio en los hábitos de los televidentes, las grandes cadenas han realizado una serie de acciones con las que sacar provecho. Así, se han asociado con desarrolldores de aplicaciones móviles que de algún modo recompensen a los usuarios por ver la televisión y al mismo tiempo interactuar con los anuncios mientras los ven.
A pesar de tratarse de una buena idea para volver a enganchar a sus clientes, los consumidores no parecen creérselo del todo puesto que de los 3.000 encuestados por NPD Group, tan sólo un 19% afirmó utilizar estos dispositivos para comprar productos vistos antes en los anuncios. La mayoría de ellos lo que hace es navegar por las redes sociales o bien buscar información sobre lo que están viendo en páginas web como IMDb o Wikipedia.
Mike Caprio, vicepresidente de vídeo en la empresa DG, opina que lo que hay que hacer es recopilar datos sobre los hábitos de los anunciantes y a partir de ahí actuar.
La televisión "social"
Y es que justamente eso es lo que han traído estas nuevas tecnologías a los hogares, ya no se trata de un público objetivo que absorbe todo lo que ve y oye en la televisión, ahora el público opina, convierte la caja tonta en algo social y también activo.
Según Viacom, un 72% de los consumidores disfruta comentando tanto con sus amigos como con otros fans el programa que están viendo en ese momento, hablan de los actores de una u otra serie o del trailer de una nueva película. Inmobil asegura que 2 de cada 3 personas utilizan el teléfono móvil mientras están sentados delante del televisor. Y eso no es todo, TVGuide asegura que el 95% de los fans que participan en las redes sociales lo hacen después de ver el capítulo por la televisión, un 53% antes de que el capítulo se emita y un 40% durante esa emisión.
Cambia la forma de medir la popularidad
La audiencia de los programas ahora cómo se mide es en tuits. De hecho, Twitter es tan importante para la televisión que a principios de año se publicó Twitter TV Book, un estudio donde se recogía información sobre su influencia en la televisión.
La conclusión lógica a la que llegamos es que las redes sociales han cambiado la forma de consumir la televisión y algunas como sin duda Twitter, se han convertido en estrellas del medio. De hecho, un 95% de las conversaciones online que se tienen sobre televisión se dan en Twitter.
Twitter, consciente de su poder
Sabedor de la importancia que tiene su red social, los responsables de Twitter han decidido tomar cartas en el asunto para aprovechar su popularidad y lo han hecho presentando Amplify, un servicio que añade a sus 140 caracteres vídeos en tiempo real sobre lo que se está emitiendo. Aunque por el momento sólo está disponible en Estados Unidos se prevé que se extienda pronto.
Otra acción de Twitter a este respecto ha sido llegar a un acuerdo con la empresa Nielsen para crear la Nielsen Twitter Rating TV para medir con mayor precisión la audiencia televisiva y la relación de ésta con Twitter.