Pocas empresas en la historia reciente están tan asociadas al carisma de una persona. Nos referimos a Apple y Steve Jobs, claro. Sin embargo, ya hace varios años que nos dejó el hombre que popularizó los dispositivos inteligentes (smartphones y tabletas) y que su mano derecha, Tim Cook, tomó las riendas.
Con la perspectiva del tiempo, vamos a hacer memoria y ver si esta nueva época de Apple ha supuesto cambios, mejoras o fallos, o simplemente diferencias.
Vale, de acuerdo, hemos dicho en un artículo previo que no creíamos en dirigentes ni en pensadores individuales sino en el poder colectivo. De todos modos, es evidente que la trayectoria de Steve Jobs, y su prematuro fallecimiento, han marcado a la compañía de la manzana, igual que la marcó su regreso a ella en los años noventa.
Por supuesto, sabemos que hubo otros presidentes antes: Gil Amelio, Michael Spindler, John Sculley... pero, francamente, todos sabemos cuándo empezó a despegar Apple, y ellos mismos fueron los primeros en explotar el talento mediático de su jefe.
La era Jobs (1997-2011)
Da vértigo recordar todas las novedades de Apple bajo la batuta de Jobs. ¿Realmente todo aquello se presentó en catorce años? ¿Pueden repetirse aquellos tiempos de innovaciones?
Como primeras medidas, Jobs decidió descontinuar líneas obsoletas como Apple Newton, y cambiar el diseño del logo y la imagen corporativa en general de la empresa. Hoy el diseño “flat” y la sencillez del estilo suizo no llaman la atención, pero en aquel momento la tendencia era muy distinta, más colorida y abigarrada, y Apple cambió aquellas reglas del juego.
Además, se creó iTunes Store y se presentó el nuevo iMac y el MacBook. Se lanzaron el iPod, el iPhone, Apple TV (en 2007, aunque fue “hibernado” entre 2008 y 2015), el iPad, el Magic Mouse y el teclado inalámbrico.
Por otro lado, Jobs amplió el campus de Apple, añadió nuevas actividades y coordinó con Norman Foster la creación de un segundo campus con capacidad para trece mil empleados. Se espera inaugurarlo en 2017.
Los inicios del sistema operativo de la era Jobs fueron dubitativos: Cheetah (2001) y Puma (2001) fueron muy criticados. La compañía reaccionó rápido, y Jaguar (2002), Tiger (2005) y Snow Leopard (2009) dieron buenos frutos. Lion (2011), en cambio, se acogió con más tibieza, lo que provocó una inmediata “secuela”, Mountain Lion, ya con Cook.
Jobs también dio los primeros pasos de Apple en la nube. El navegador propio de Apple, Safari, apareció en 2003. Al final de su vida introdujo los servicios de iCloud y iBooks.
Se nos olvidaba. Jobs también logró lo que parecía imposible: llevar al digital el catálogo completo de The Beatles.
La era Cook (2011-actualidad)
Cook lleva al timón casi cinco años. Sin embargo, sólo recuerdo dos novedades potentes en hardware, el Apple Watch y Apple Pencil, un elemento que Jobs desechó en su día, aunque a los usuarios ha parecido gustarles. Es una de las pocas rupturas con el anterior CEO, en una carrera, como vamos a ver, de corte continuista.
La última novedad en gadgets, la batería adicional de iPhone Smart Battery Case, ha levantado muchas ampollas: cuesta 120 euros, diez veces más que otras baterías externas, y su estética ha provocado multitud de bromas.
En cuanto al sistema operativo, Mountain Lion (2011) fue muy bien recibido, pero Mavericks (2013) y Yosemite (2014) consiguieron críticas de todos los colores. El Capitan (2015) salió cuando Yosemite no cumplía un año, quizá para resolver las cuestiones de seguridad y privacidad pendientes, y en general parece haber satisfecho las expectativas.
Otra de las grandes apuestas del Apple de Cook ha sido la música, y aunque la aplicación Beats ya ha pasado a mejor vida, aún se comercializan una buena serie de auriculares patrocinados por Dr. Dre.
Quizá el principal trabajo de Cook haya estado en la nube. Entre sus méritos destaca el introducir conceptos como Apple Pay y aplicaciones como Faces o Apple Health. Igual que hizo Jobs con The Beatles, Cook se apuntó el tanto con AC/DC.
En la era Cook, además, se ha desarrollado Swift, el lenguaje de programación destinado a sustituir a Objective-C, el vetusto lenguaje de Apple, que además se ha publicado bajo licencia Open Source.
El CEO, por supuesto, no lo es todo. Jobs no está, pero su Director de Diseño en jefe, Jony Ive, continúa. Ive se encarga del acabado final del hardware, el software, la experiencia de usuario, las interfaces, las tiendas, el nuevo campus de la compañía, concebido por Norman Foster, y hasta las cajas de los productos.
Si una pieza fundamental del entramado sigue en marcha, entonces, ¿por qué se ha frenado la innovación? ¿Puede decirse que Apple ha reculado?
Quizá la crisis económica mundial tenga la culpa. Desde que Cook manda, gran parte de la población del primer mundo hemos perdido bastante poder adquisitivo. No es un buen momento para comprar nuevos dispositivos, además de los que ya tenemos.
La competencia de Apple se ha reforzado, en parte aprendiendo de la compañía californiana. Han llegado los e-readers, donde Amazon se lleva la parte del león, y la realidad virtual, por la que Facebook apuesta fuerte, aunque está todo por decidir.
En resumen, una vez repasas todo el trabajo hecho, te das cuenta de que Cook no ha estado parado, y que habrá Apple para rato.
Fuente imagen - thetaxhaven - Flickr